La serigrafía y la impresión textil son procesos que demandan precisión y planificación desde el archivo original. Si el diseño base no está bien construido, el resultado puede ser desastroso: colores que se mezclan, líneas mal impresas o bordes pixelados. Por eso, preparar correctamente un archivo vectorial para camisetas o serigrafía es fundamental.
En este artículo te explicamos los 5 puntos más importantes que debes tener en cuenta al vectorizar tus diseños para impresión textil, especialmente si planeas imprimir sobre camisetas, sudaderas o cualquier tipo de prenda promocional.
En la serigrafía, cada color se imprime por separado a través de pantallas, por lo que es indispensable trabajar con archivos vectoriales con colores planos, capas bien organizadas y formas cerradas. Además, los vectores permiten escalar el diseño a cualquier tamaño sin perder calidad, algo fundamental cuando se trabaja con diferentes tallas o formatos.
Un diseño vectorial bien preparado también facilita la producción, reduce errores y mejora el aspecto profesional del producto final.
Uno de los errores más comunes es enviar un archivo vectorial con textos sin convertir. Si el impresor no tiene instalada la misma fuente que el diseñador usó, el archivo se abrirá con una tipografía diferente, alterando por completo el diseño.
✅ Solución: Convierte todos los textos a curvas (también llamado “crear contornos” o “expandir texto”) antes de enviar el archivo.
Esto asegura que la tipografía se mantenga exactamente como fue diseñada, sin depender de las fuentes instaladas en otras computadoras.
La serigrafía tradicional trabaja con tintas sólidas. Los degradados, sombras y transparencias pueden ser difíciles o imposibles de imprimir correctamente. Además, los colores deben estar bien separados y definidos para que cada uno tenga su propia pantalla.
✅ Solución:
Usa colores planos sólidos, sin degradados.
Define claramente cada color (por ejemplo: Cian, Rojo Pantone 185, Negro).
Evita efectos de fusión, transparencias o sombras suaves.
Esto garantiza una impresión limpia, sin sorpresas, y simplifica el trabajo del impresor.
En un archivo vectorial para camisetas, es esencial que todas las formas estén cerradas. Las formas abiertas pueden provocar errores en la separación de colores o durante el corte de vinilo.
✅ Revisa que:
Todas las líneas estén cerradas y conectadas
No haya nodos sueltos o duplicados
Los contornos sean suaves y sin “ruido” innecesario
Un archivo limpio no solo mejora la calidad de impresión, también permite un trabajo más rápido y preciso en taller.
Aunque los vectores son escalables, es recomendable preparar los archivos a tamaño real (1:1), especialmente si el diseño tendrá un tamaño específico en la prenda (por ejemplo: 25x30 cm en el frente de una camiseta).
✅ Solución:
Diseña en la escala final que deseas imprimir.
Usa reglas y guías para visualizar el tamaño sobre la prenda.
Asegúrate de que los elementos no estén demasiado juntos ni demasiado pequeños para su aplicación real.
Esto evita errores de interpretación y garantiza que lo que ves en pantalla será lo que verás en la camiseta.
El formato de entrega es fundamental. Muchos talleres de impresión prefieren archivos en AI, EPS, PDF o SVG, con cada color en una capa separada. Esto facilita la separación de tintas, el registro y el montaje de pantallas.
✅ Antes de enviar tu archivo:
Asegúrate de guardar en formato AI, EPS o PDF vectorial.
Organiza cada color en una capa independiente, si el diseño lo permite.
Elimina objetos invisibles, capas ocultas o restos de pruebas.
Un archivo bien estructurado reduce tiempo y errores en taller, y genera confianza en tu profesionalismo.